6 Alimentos que Nunca debes Comer al Desayuno

por Tiffany Colorado febrero 06, 2018

El desayuno es tal vez la comida más importante del día. Te proporciona la energía y la concentración necesarias para realizar tus labores diarias. Por esta razón saber qué incluir en el desayuno resulta ideal para mantener una buena salud y hacer que tu dieta sea todavía más efectiva. Toma nota de estos 6 alimentos prohibidos para tu desayuno.

La recomendación es que incluyas en tu desayuno una proteína, un carbohidrato y vegetales o grasas saludables como opciones adicionales de acuerdo con lo que más te guste comer.

A lo que debes decir NO para el desayuno

1. Bacon
¿Sabías que cada estadounidense puede llegar a consumir 20 libras de tocino al año? Se trata de uno de los ingredientes clásicos del desayuno de muchas personas, por lo que sacarlo de la dieta diaria es muy difícil.

El tocino cuenta con altas cantidades de sal y nitrato de sodio por lo que no es muy recomendado para quienes sufren de tensión alta o tienen complicaciones cardiacas. Trata de mantenerlo alejado de tu menú en la mañana.

2. Jugos Artificiales
Que diga que es un jugo de frutas no quiere decir que en verdad lo sea. Ten cuidado con los jugos artificiales que encuentras en el mercado y que te prometen una bebida fresca y natural. Estas bebidas generalmente contienen una buena cantidad de químicos que no le hacen nada bien a tu organismo.

Opta por preparar jugos en casa con verdadera fruta natural o mejor aún comer la fruta entera, pues evitarás añadirle más azúcar adicionándole agua y endulzantes no naturales. Con las frutas, puedes además preparar batidos naturales para ayudar a mantener tu piel hidratada y con buena apariencia. Te invitamos a leer nuestro post al respecto con algunas recetas imperdibles.

3. Cereales Azucarados

Otro gran mito sobre la comida saludable. En el mercado encuentras una gran variedad de cereales pero no todos proveen realmente nutrientes beneficiosos para tu cuerpo. Lo mejor es optar por las tiendas naturales y orgánicas que te ofrecen productos más confiables, si lo que te encanta es acompañar tus desayunos con un fresco plato de cereal con leche.

Un tip saludable es utilizar semillas de chía para acompañar tus jugos, pues proporcionan vitaminas y nutrientes que le hacen muy bien a tu sistema digestivo, además de ayudarte a adelgazar.

4. Pan Blanco

Caminar frente a una panadería y sentir el olor de pan caliente y fresco puede ser la tentación más grande para quienes están comprometidos con su dieta.

El pan blanco contiene harinas, endulzantes y grasas que no son nada recomendables para tu salud. Opta por el pan integral pero ten cuidado a la hora de comprarlo, pues en muchos casos ofrecen información que no es del toda cierta.

El pan integral se prepara con harina 100% de grano entero y no refinada. Puedes encontrar pan a base de trigo como también pan integral de centeno, quinua, chía y otros granos saludables y beneficiosos para tu cuerpo.

3. Embutidos

Grasa que no te hace bien para comer en la mañana. No solo por su alto contenido grasoso sino porque le restará a tu cuerpo energía necesaria para soportar largas jornadas de trabajo. Lo ideal en el desayuno es que sea nutritivo pero con ingredientes frescos y livianos que no te hagan sentir pesado después de comer.

Las tradicionales arepas, empanadas o papas fritas son prohibidas a esta hora de la mañana, opta por pan o tostadas integrales, huevos bajos en sal y mucha fruta.

Barras de granola o galletas comerciales

Las barras de granola contienen cantidades de sodio y azúcar que pueden no ser tan saludables. Está bien tomarlas como snack de vez en cuando si es que practicas ejercicio de forma regular, pero no como un ingrediente básico en tus desayunos.

Lo mismo sucede con las galletas comerciales pues contienen azúcar y grasas que serán una piedra en el camino a la hora de llegar a tu peso ideal. Puedes preparar galletas caseras con productos naturales y mucho más saludables.

Como ves no es difícil organizar un menú saludable para tu desayuno, solo debes encontrar ingredientes frescos y cambiar la forma en que preparas tu comida eliminado el exceso de grasa y condimentos artificiales.